"No hay peor traición que hacia una misma."
Esta es una frase que escuché alguna vez y me hizo tanto sentido. Y es muy real porque ¿cuántas veces nos hemos fallado nuestras promesas? ¿cuántas veces hemos dicho que sí cuando en realidad queríamos decir no? ¿cuántas veces nos hemos puesto al final para no fallarle a los demás?
Muchas. Como mujeres lo hemos hecho tantas veces.
Pero cada vez que nos dejamos de elegir, nos estamos fallando, estamos debilitando nuestra autoconfianza, y nos estamos afirmando que no es tan importante lo que nosotros queremos o necesitamos.
Y por eso hoy te quiero dejar con esta invitación:
Elígete. Honra tu verdad. Escucha tu voz interior.
Durará mucho más la incomodidad de decir sí a algo que no queríamos, que la incomodidad del momento de decir que no. Y eso hará toda la diferencia.
Hazlo con pasos pequeños. Empieza por pequeñas acciones como cumplirte tu palabra de despertarte 10 minutos más temprano para que tengas tiempo de meditar. O de elegir a dónde quieres ir a comer cuando te preguntan y no solo decir " a donde quieras, me da igual". O de decir que algo no te gusta y afirmarlo en voz alta para ti.
Recupera tu voz, tu palabra, tu poder de elección.
Porque cuando te empiezas a elegir y a honrar tu voz interior, se empieza a crear una confianza y seguridad dentro de ti misma que nadie te puede quitar.
Con cariño,
Chris.